50 AÑOS DE LA COMPUTACIÓN EN MÉXICO
y
25 AÑOS DE LA COMPUTACIÓN EN EL CINVESTAV

Programa de Actividades



  INTRODUCCIÓN

Hoy en dí­a, la importancia de la computación en nuestras vidas es, sin lugar a dudas, incuestionable. Dicha importancia se refleja en una clara (y a veces hasta obsesiva) dependencia de las computadoras, y las diversas tecnologí­as relacionadas con ellas, que presentan investigadores de diferentes disciplinas e incluso un número cada vez mayor de estudiantes y público en general. El mundo moderno parece girar en torno al ritmo que las computadoras le imponen, como podemos constatar a diario cuando vamos a un banco, cuando compramos un boleto de avión, cuando pagamos con una tarjeta de crédito y hasta cuando realizamos tareas tan simples como encender nuestro automóvil.

Sin embargo, y por extraño que esto pudiera sonar, a un lugar como el CINVESTAV, que es un centro de investigación de primer nivel, con amplio reconocimiento nacional e internacional, le tomó 23 años el poder contar con un Departamento de Computación. Las razones son varias, aunque principalmente se relacionan con la dificultad para conseguir recursos humanos en número y calidad suficiente, lo cual ha sido, por muchos años, una tarea muy difí­cil de lograr en México1.



50 AÑOS DE LA COMPUTACIÓN EN MEXICO

Antecedentes históricos

El campo de las ciencias computacionales en México tiene sus orígenes a mediados de la decada de los 1950s. En dicho período, destaca la llegada de la primera computadora electrónica a nuestro país [1]. Este importante evento, cuyo 50 aniversario celebramos en este 2008 tuvo una historia azarosa, aunque, afortunadamente, con un final feliz.

Todo empezó en 1955, año en que el Ing. Sergio Beltrán López (ver figura 1) le propone al Dr. Nabor Carrillo Flores (entonces rector de la UNAM), la instalación de una computadora en nuestra máxima casa de estudios. Esto generó opiniones encontradas dentro de la UNAM. Varios investigadores se oponían a esto, debido a que lo consideraban un lujo innecesario. Al parecer, el Ing. Beltrán se interesó en las computadoras a raíz de un proyecto de colaboración entre la UNAM y la Universidad de California en Los Angeles (UCLA). El grupo mexicano (del cual también formaba parte el Dr. Carrillo Flores) tenía que resolver sistemas de ecuaciones simultáneas tan complejos, que les tomó 9 meses hacerlo. Cuando enviaron sus resultados a UCLA, su contraparte norteamericana verificó los resultados en menos de 3 semanas. Esto dejó atónito al grupo mexicano, pues según sus estimaciones, se requeriría aproximadamente la mitad de la población de Estados Unidos para poder realizar esos cálculos en tan corto tiempo [4]. Al preguntarle sobre este asunto al director del proyecto en UCLA, su respuesta fue que los cálculos los habían efectuado con el Cerebro Electrónico Nacional. El Ing. Beltrán pensó que se trataba de una broma y movido por la curiosidad, viajó a UCLA. Ahí descubrió que el Cerebro Electrónico Nacional era una computadora IBM-650. Obviamente, no le tomó mucho tiempo al Ing. Beltrán darse cuenta del potencial de tal máquina e instó rápidamente al Dr. Nabor Carrillo Flores a instalar una computadora similar en la UNAM. Se cree que el Dr. Carrillo Flores acabó apoyando la propuesta debido a que él mismo había estado involucrado en el citado proyecto con Estados Unidos. Sin embargo, debido a las limitantes presupuestales de la UNAM, el rector le dijo al Ing. Beltrán que se rentaría una computadora, pero que ésta debía volverse auto-financiable en 12 meses. De no hacerlo, el proyecto se cancelaría. Ultimados los detalles con la IBM, se firmó un contrato para rentar una IBM-650 por un monto de $25,000 pesos mensuales. Cabe destacar que el plan original del Ing. Beltrán era rentar una IBM-704, pero a pesar del descuento del 60% que les ofreció IBM, no les alcanzó el dinero, y por ello se tuvieron que conformar con una IBM-650 que, además, no era nueva, sino que había sido heredada de la Universidad de California en Los Angeles (UCLA).

El 8 de junio de 1958, abre sus puertas el Centro de Cálculo Electrónico (el CCE), ubicado en el sótano de la antigua Facultad de Ciencias. Su primer director fue el Ing. Beltrán López y entre sus colaboradores estuvieron Renato Iturriaga, Manuel Alvarez, Lian Karp, Javier Treviño, Luis Varela y Eduardo Molina. En el CCE se instaló la computadora IBM-650 de bulbos que se le rentó a IBM (ver figura 2).  Esta máquina operaba con un tambor magnético con capacidad para 20,000 dígitos, efectuaba 1,300 operaciones de suma y resta por segundo y funcionaba con lectora y perforadora de tarjetas, adoptando un sistema numérico llamado bi-quinario. Utilizaba un ensamblador llamado SOAP (Symbolic Optimizer and Assembly Program), un pseudo-compilador llamado RUNCIBLE y un intérprete llamdo BELL [5]. Las primeras tareas que se le encomendaron a esta computadora fueron los de resolver problemas de astronomía, física e ingeniería química. Incluso, se conformó una base de datos para los antropólogos. En agosto de 1959, se dictó el primer coloquio sobre computadoras electrónicas y sus aplicaciones.


Figura 1: Ing. Sergio Beltrán


Figura 2: Computadora IBM-650, instalada en la UNAM en junio de 1958

El éxito rotundo del CCE los llevó a adquirir más equipo de cómputo.

Conforme los investigadores y las asesorías aumentaban, el Centro de Cálculo En 1960, se instaló una Bendix G-15 semitransistorizada (ver figura 3), con memoria de tambor magnético que giraba a 1800 revoluciones por minuto y que podía almacenar 2,160 palabras de 29 bits cada una, con un tiempo de acceso de aproximadamente 27 milisegundos. También se instalaron una lectora y una perforadora de cinta de papel y una máquina de escribir que le servía como consola.


Figura 3: Bendix G-15

Para 1961 se empezó a planificar el uso de esta computadora, tanto interno, como externo, ya que se proporcionó asesoría a diversas instituciones que lo solicitaron. Por ejemplo, se concretaron los siguientes proyectos Programa lineal para mezcla de gasolinas, para PEMEX; Inventario Forestal, para el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales; Modelo matemático de la optimización de una planta siderúrgica, para Nacional Financiera; y Diseño de transformadores para manufactura, para General Electric. También se realizaron varios proyectos de corte académico, tales como los siguientes: Cálculo de Montecarlo para contenedores de doble anticoincidencia, para el Instituto de Física; Integración de órbitas de protones primarios, para el Instituto de Geofísica; Densidades, potenciales y velocidades de escape en una galaxia esférica, para el Observatorio Astronómico Nacional y Análisis sísmico de estructuras, para el Instituto de Ingeniería.

También en 1960, se desarrolla en el Departamento de Teoría Administrativa de la UNAM, la computadora analógica UNIKORNIO, que puede considerarse como la primera computadora de ese tipo que se construyó en México.

En 1961 se crea otro centro de cómputo en la parte baja de Rectoría de la UNAM: la Unidad de Sistematización de Datos. El Dr. Manny Lemann fue invitado en 1962 a la UNAM y con su ayuda se diseñó la computadora digital Maya, basándose en el diseño de la Sabre, que era una máquina que daba servicio en la Universidad de Israel.

En 1962, el CCE renta una Bull Gamma-30 (ver figura 4), con memoria de ferrita y totalmente transistorizada.


Figura 4: Bull Gamma-30

También se instala ese año una terminal de teleproceso que conectó al CCE con la computadora AN/FSQ32 del Departamento del Command Research Laboratory en Santa Mónica, California, Estados Unidos.

En 1965, se instaló en la UNAM la primera computadora para apoyo administrativo, automatización de nóminas y contabilidad: una IBM-1440 (ver figura 5). Esto da lugar a la creación del Departamento de Sistemas de Patronato Universitario.


Figura 5: IBM-1440

En 1967, se fusionan la Sección de Máquinas de Servicios Escolares y el Departamento de Sistemas del Patronato Universitario, para formar la Dirección General de Sistematización de Datos. La Dirección General de Sistematización de Datos sustituye sus equipos por una IBM 360/40.

En 1970 se crea el Centro de Investigaciones en Matemáticas Aplicadas, Sistemas y Servicios, con la integración de la Dirección General de Sistematización de Datos y el Centro de Cálculo Electrónico. Se reúnen bajo una sola dirección, los servicios de cómputo para la docencia, la investigación y la administración.

Mientras tanto, En 1961, el Instituo Politécnico Nacional había creado el Centro Nacional de Cálculo (CENAC), donde se instaló una computadora IBM-709 (ver figura 6).


Figura 6: IBM-709

A diferencia de la computadora de la UNAM, la máquina del CENAC no fue rentada, sino que la donó IBM. Más tarde, el CENAC adquirió una computadora analógica PACE-231, de Electric Associates Inc y una computadora digital IBM-1620.

En 1965, el CENAC crea una maestría en ciencias con especialidad en computación, para cuya organización se contó con la colaboración del Dr. Harold V. McIntosh (ver figura 7). Dos años más tarde, la Escuela Superior de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (ESIME) incorpora a su plan de estudios la especialidad en computación.


Figura 7: Dr. Harold V. McIntosh

El Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey comenzó a impartir cursos introductorios a la computación (a nivel licenciatura) desde mediados de los 1960s, y en 1967 crea la carrera de Ingeniero en Sistemas Computacionales. Poco después, la Universidad Autónoma de Puebla y la Universidad Autónoma de Nuevo León ofrecieron licenciaturas similares. En el caso de la UNAM existe el antecedente de un programa de maestría en ciencias computacionales que estuvo en funciones en la década de los sesentas financiada por la UNESCO. Los estudiantes de esa maestría provenían en su gran mayoría de la escuela de ciencias e ingeniería de la UNAM [4]. Para la década de los setentas, la UNAM, la Universidad de Chapingo y la Universidad Iberoamericana ofrecían una maestría en ingeniería computacional [6,7].

Coincidentmente, en el mismo año de la llegada de la primera computadora a México, el ingeniero Raúl Pavón de la Comisión Federal de Electricidad publica en un congreso internacional su trabajo de investigación titulado: “The Mexican Light and Power Company Introduces a direct way for fast computation of industrial services with power factor adjustment”, el cual discute un método numérico alternativo para acelarar el cómputo de la raíz cuadrada de acuerdo al algoritmo tradicional [8]. Aparentemente, el artículo del ingeniero Pavón es el primer trabajo mexicano en ciencias computacionales que fue publicado en un foro internacional. Asimismo el artículo de los doctores Guzmán Arenas y McIntosh de 1966, titulado CONVERT parece ser el primer artículo mexicano publicado en una revista internacional de computación [9].

Mientras tanto, en 1973 se fundó en la Universidad Autónoma de Puebla la Licenciatura en Computación dentro de la Escuela de Ciencias Físico-Matemáticas. Este programa de estudios fue promovodio por el Dr. Isidro Romero Medina quien asu vez solicitó la asesoría del Dr. Harold V. McIntosh para el diseño de la currícula de materias, la cual se distinguió desde aquellos años como una de las carreras en computación más orientada hacia los fundamentos matemáticos de todo el país.

Poco tiempo después, en 1975, el Dr. McIntosh y su equipo de colaboradores establecen el Departamento de Aplicación de Microcomputadoras en el Instituto de Ciencias de la UAP. En los siguientes años, el grupo del Dr. McIntosh produciría desarrollos notables tanto en hardware como en software, de entre los que destacar el diseño de una computadora personal, CP-UAP, la cual fue diseñada sobre el bus STD, con una tablilla por función (procesador central basada en el microprocesador NEC V20, con un banco de memoria propio e interfaces de video y de discos) [10].

Para principios de los años ochentas, el antiguo CCE de la UNAM había establecido una clara división entre sus actividades administrativas y las de investigación. La primera rama dio origen a la División General de Servicios de Cómputo Académico (DGSCA), mientras que la segunda engendró el Instituto de Investigaciones en Matemáticas Aplicadas y Sistemas (IIMAS). Este centro llegó a contar hasta con 23 investigadores en computación trabajando de tiempo completo [4].

A pesar de estos avances significativos, los problemas económicos de los años ochentas trajeron consigo consecuencias devastadoras para la investigación en Computación en México. En efecto, la llamada Década perdida produjo que la gran mayoría de los grupos de investigación en el área de la computación se disgregaran e incluso no pocos de ellos desaparecieron. Un data significativo es que para 1983, el IIMAS de la UNAM pasó de más de 20 investigadores a sólo 4 [11].

Y es en este contexto de crisis en el que, en 1983, se funda la Sección de Computación en el Departamento de Ingeniería Eléctrica del Centro de investigación y de Estudios Avanzados del I.P.N. El principal propósito de establecerla fue hacer frente a las necesidades crecientes que se tenían en México en las ramas de la Computación, la Informática y sus aplicaciones.

Otro centro de investigación importante creado en la década de los ochentas fue el el Centro de Investigación en Matemáticas (CIMAT) con sede en la ciudad de Guanajuato.

En la década de los noventas, los grupos de investigación en el área toman un respiro pues se crean nuevos centros de investigación tales como: El Centro de Investigación en Computación (CIC) del Instituto Politécnico Nacional, el Laboratorio Nacional de Informática Avanzada (LANIA) en Xalapa, Veracruz; la Coordinación de Ciencias Computacionales del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE) y el Departamento de Ciencias de la Computación del Centro de Investigacion Cientifica y de Educacion Superior de Ensenada (CICESE), entre otros.


Bibliografía

[1] Aquiles Cantarell y Mario González, "Historia de la Computación en México, una Industria en Desarrollo", Colección Hombre Digital, México, 2000, ISBN 968-5215-01-4.

[2] ITESM, "Internet, Columna vertebral de la sociedad de la Información", Colección Humanidades TEC. Miguel Ángel Porrúa Librero-editor. México, 2005.

[3] Carlos A. Coello Coello, "Breve historia de la computación y sus pioneros", Fondo de Cultura Económica. México, 2003.

[4] Larissa Adler Lomnitz and Laura Cházaro, "Basic, Applied and Technological Research: Computer Science and Applied Mathematics at the National Autonomous University of Mexico", Social Studies of Science, Vol. 29, No. 1, pp. 113--134, 1999.

[5] Manuel Soriano y Christian Lemaitre, "La era digital", Ciencia y Desarrollo, Vol. 60, CONACyT, México, 1985

[6] C. Lemaitre, “La computación en la UNAM en el período de 1968- 1980: Una interpretación (in spanish)”, in Pasado, Presente y Futuro de la Computación: 30 Aniversario de la COmputación en México. Mexico City, Mexico: UNAM, 1988, pp. 358–369.

[7] Y. F. Villaseñor, “Evolution of a program in computing for a Latin American graduate college,” SIGCSE Bull., vol. 14, no. 2, pp. 11–16, 1982.

[8] R. Pavon, “The Mexican light and power company introduces a direct way for fast computation of industrial services with power factor adjustment,” in ACM ’58: Preprints of papers presented at the 13th national meeting of the Association for Computing Machinery. New York, NY, USA: ACM Press, 1958, pp. 1–3.

[9] A. Guzmán and H. V. McIntosh, “CONVERT,” Communications of the ACM, vol. 9, no. 8, pp. 604–615, 1966.

[10] G. Cisneros, “La computación en México y la influencia de H. V. Mcintosh en su desarrollo (in Spanish),” Available at:
http://delta.cs.cinvestav.mx/~mcintosh/oldweb/pothers.html, July 1991.

[11] C. Lemaitre, “50 años de la computadora en México (in spanish),” La Jornada de Oriente, pp. 1–2, January 2008.



   

25 AÑOS DE LA COMPUTACIÓN
EN EL CINVESTAV

Antecedentes históricos

EN 1983,  la computación se erigía, cada vez con más fuerza, como una disciplina vital para el desarrollo científico y tecnológico de las naciones (en particular, las más desarrolladas). No en balde, la prestigiosa revista norteamericana “Time”, en su ejemplar del 3 de enero de 1983, dedicó su portada a la “computadora”, la cual fue denominada “máquina del año”, reemplazando al tradicional “hombre del año” (ver figura 1).


Figura 1: Portada de la revista Time del 3 de enero de 1983.

El CINVESTAV, siendo una institución científica de primer nivel, no era ajena a la importancia de las computadoras. Según consta en [1], el Departamento de Fisiología fue el primero en contar con una minicomputadora, en el año de 1969. El uso de esta computadora fue compartido con el Departamento de Ingeniería Eléctrica, que la utilizó para investigaciones relacionadas con control digital directo y control de centrales telefónicas. Así mismo, se utilizó también para fines docentes.

Para el año 1983, el CINVESTAV contaba (según consta en [1]) con 7 minicomputadoras, distribuidas en los Departamentos de Fisiología, Farmacología, Toxicología e Ingeniería Eléctrica. Así mismo, habían decenas de microcomputadoras y se tenía acceso a una computadora grande (mainframe) a través de diversas terminales. El Departamento de Ingeniería Eléctrica había estado impartiendo desde 1972, cursos sobre Computación Electrónica tales como “Introducción a la Computación”, “Teoría de Autómatas” y “Arquitectura de Computadoras”, entre otros. Así mismo, el uso de las computadoras de todos tamaños (desde mainframes hasta microprocesadores) en un número cada vez mayor de proyectos del Departamento de Ingeniería Eléctrica hacía evidente que la Computación Electrónica acabaría por reclamar un espacio propio tarde o temprano.

Fue en esta atmósfera que se gestó una propuesta para establecer un Departamento de Computación en el CINVESTAV hacia principios de 1983 [1]. Esta propuesta fue realizada con la colaboración de los Dres. Héctor Nava Jaimes (entonces Director General del CINVESTAV), Juan Milton Garduño (entonces Jefe del Departamento de Ingeniería Eléctrica) y Adolfo Guzmán Arenas (fundador y primer Jefe de la Sección de Computación del CINVESTAV).

Los aspectos más sobresalientes de esta propuesta serán discutidos brevemente a continuación [1]:

  • En la propuesta se plantean dos opciones posibles para dar un lugar propio a la computación dentro del CINVESTAV:

  1. Contar con un “Departamento de Ingeniería Eléctrica y Computación”.

  2. Contar con dos departamentos (el “Departamento de Ingeniería Eléctrica” ya existente y un nuevo “Departamento de Computación”).

En el documento se opta por planear la creación de un Departamento de Computación independiente del Departamento de Ingeniería Eléctrica, sin que esto obviamente implicara que la computación dejaría de cultivarse dentro del Departamento de Ingeniería Eléctrica. Una de las razones principales por las que se sugiere esta segunda opción es el tamaño que ya entonces tenía el Departamento de Ingeniería. Dado que se preveía que Computación crecería bastante (debido a la importancia de esta disciplina), se argumentaba que tener juntos a los dos departamentos haría que en un período de dos o tres años, este departamento conjunto creciera al doble o al triple del tamaño que tenía en 1983 el Departamento de Ingeniería Eléctrica. También se daba el argumento académico. Dado que las primeras licenciaturas en computación ofrecidas en México se remontan a finales de los 1960s [1], se argumentaba la necesidad de tener programas propios de posgrado en un Departamento de Computación que contaría además, con una identidad propia2.

  • En la propuesta se planteaba una estrategia a 3 años para la creación de un Departamento de Computación en el CINVESTAV:

  1. 1er. Año: Crear la “Sección de Computación” dentro del Departamento de Ingeniería Eléctrica.

  2. 2º Año: Inicio de actividades como “Departamento de Computación”.

  3. 3er. Año: Formación de al menos dos secciones del “Departamento de Computación”.

Claramente, la propuesta indicaba la naturaleza transitoria que tendría la “Sección de Computación”, la cual se planteaba que iniciara operaciones en octubre de 1983. Según el cronograma planteado en la propuesta, para octubre de 1984, habría ya un “Departamento de Computación” funcionando en el CINVESTAV. Evidentemente, esta meta no se cumplió, pues se requirieron 23 largos años para poder transformar la “Sección de Computación” en un “Departamento de Computación”.

  • Se estimaba en la propuesta que para 1985 se tendrían al menos dos secciones dentro del “Departamento de Computación”, si bien la idea era contar con 3 grupos de investigación, cada uno de los cuales tendría entre 10 y 15 investigadores, con una estructura jerárquica (por cada grupo de investigación habrían dos profesores titulares, 3 o 4 adjuntos, auxiliares de investigación y técnicos). Hacia comienzos del tercer año del proyecto, se consideraba, en un cálculo conservador, que se contaría con al menos 12 investigadores (entre profesores titulares y adjuntos) y 8 auxiliares de investigación. También se planteaba iniciar el funcionamiento de una maestría en computación en octubre de 1983.

  • Se estimaba que se formarían a 25 maestros en ciencias de la computación por año, a partir de 1985. Este es otro dato interesante, porque esta cifra similar al promedio de graduados que el grupo de computación ha alcanzado apenas en años recientes. No obstante, a pesar de lo optimista que esta cifra resultó en un principio, es importante mencionar que la Sección de Computación tuvo, desde su creación, la matrícula más alta de entre todas las secciones del Departamento de Ingeniería Eléctrica [5].

  • Los objetivos del “Departamento de Computación” serían los de cualquier otro departamento del CINVESTAV:

  1. Formación de recursos humanos.

  2. Realización de proyectos de investigación que buscaran avanzar el conocimiento en el área.

  3. Realización de proyectos de desarrollo tecnológico que generarían “objetos” (hardware y/o software) para resolver problemas prácticos específicos.

Estos objetivos no han perdido vigencia y siguen siendo los mismos del actual Departamento de Computación.

  • Cabe destacar que el posgrado en computación ofrecido por la Sección de Computación fue uno de los primeros en México3, y el primero en ser ofrecido por un Departamento de Ingeniería Eléctrica mexicano [5].


Figura 2: Edificio del Departamento de Computación

La Separación de los Programas de Computación

En la historia de la Sección de Computación, se puede hablar de cuatro etapas:

  1. 1983-1987. Inicio de operaciones. En este período, se realizan proyectos importantes con el Instituto Mexicano de Comunicaciones de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, con la UNESCO y con la Gerencia de Telecomunicaciones de PEMEX, entre otros. Cabe destacar que quedan pocos investigadores de este período que todavía continúan apoyándonos en el actual Departamento de Computación: los Dres. Guillermo Morales Luna, Sergio Víctor Chapa Vergara y Ana María Martínez Enríquez.

  1. 1988-1992. Crecimiento lento del Grupo. En este período se gradúan unos 50 estudiantes de maestría y los 2 primeros estudiantes de doctorado [2].

  1. 1993-1999. Este es posiblemente el período más crítico que hemos experimentado, pues fue cuando nuestros indicadores presentaron un descenso dramático. Esto fue debido, en buena medida, al bajo número de investigadores con que se contaba.

  1. 2000-2006. Este es el período de consolidación en que nuestra planta de investigadores experimentó un crecimiento importante, el cual nos permitió alcanzar un punto de estabilidad en nuestra productividad académica y en nuestros indicadores.

A partir de 2002 fue cuando comenzó a vislumbrarse con mayor claridad la posibilidad de contar con los indicadores necesarios para hacer sostenible un programa de maestría y otro de doctorado que fuesen independientes de los del Departamento de Ingeniería Eléctrica, así como la posibilidad misma de convertirnos en un departamento. Sin embargo, estas propuestas fueron vistas como actos de suprema osadía por varios miembros del Colegio de Profesores de ese momento. Los escépticos cuestionaban la robustez de las buenas cifras de aquel entonces, y pedían un poco más de tiempo para poder cerciorarse de que estos indicadores podrían ser sostenibles en el largo plazo.

Para 2005, los indicadores de la entonces Sección de Computación se mostraban ya bastante sólidos, mostrando claramente que se había alcanzado finalmente un periodo de estabilidad en lo concerniente a la productividad. Por ejemplo: de los 12 investigadores de aquel entonces, 11 estaban en el SNI (92%), la media de publicaciones en revistas internacionales con arbitraje estricto por profesor había sido superior a 2.0, el número de graduados de maestría por profesor era también superior a 2.0, la eficiencia terminal del programa de maestría superaba el 50% y la eficiencia terminal de doctorado era muy cercana al 50%.



Figura 3: Cluster de 32 PCs del Departamento de Computación

La Creación del Departamento de Computación

La separación de nuestros programas de maestría y doctorado llevó, de manera natural, a proponer la creación del Departamento de Computación. Las motivaciones fueron similares a las indicadas anteriormente, aunque en este caso se suma el de la independencia en el manejo presupuestal (considerado de gran importancia para poder definir políticas de desarrollo totalmente independientes de las de nuestros colegas del Departamento de Ingeniería Eléctrica), así como el poder tener mayor visibilidad ante el resto del CINVESTAV. Este interés nos llevó a presentar un nuevo documento en 2006, en el que se propuso la creación del Departamento de Computación [4]. El destino de este documento fue similar al de su predecesor: la propuesta se envió al CAC, el cual autorizó la creación del nuevo departamento. Posteriormente, esta decisión fue ratificada tanto por la Dirección General como por la Junta Directiva del CINVESTAV. Para finales de agosto de 2006, eran finalmente una realidad tanto la existencia del Departamento de Computación como la de sus dos programas (maestría y doctorado) propios. Resulta más que evidente la euforia que nos invadió tras haber cumplido en 2006 una meta que tomó 23 largos años en concretarse. El 18 de septiembre de 2006 se realizó un brindis para celebrar tan importante evento, contándose con la presencia de la Dra. Rosalinda Contreras Theurel (entonces Directora General del CINVESTAV), el Dr. José Mustre León (entonces Secretario Académico) y el Dr. Isidoro Gitler (Jefe del Departamento de Matemáticas), así como de un grupo numeroso de investigadores y estudiantes del recién creado departamento y del Departamento de Matemáticas.


Indicadores Actuales

La situación actual del Departamento de Computación se presenta aquí. Una serie de tablas que resumen los indicadores principales.



Figura 4: Sala de servidores.



Figura 5: Laboratorio de computadoras para uso de los estudiantes.

Líneas de Investigación

A raíz de la creación del Plan para el Establecimiento del Departamento de Computación [3], se hizo una revisión y una actualización de nuestras líneas de investigación, las cuales quedaron constituídas de la manera siguiente:

  1. Fundamentos de la computación e inteligencia artificial.

  1. Bases de datos y sistemas de información.

  1. Programación de sistemas, sistemas operativos, sistemas distribuidos y sistemas de tiempo real.

  1. Criptografía, arquitectura de computadoras y hardware reconfigurable.

  1. Graficación, visualización y procesamiento de imágenes.

Actualmente, el Departamento de Computación cuenta con una planta de 15 investigadores de tiempo completo. Sin embargo, sería deseable poder crecer al menos a 20 investigadores en los próximos años, debido a que existen líneas de investigación de gran importancia, las cuales no cultivamos actualmente por falta de especialistas en esas áreas dentro de nuestro personal (p.ej., diseño de compiladores). Cabe destacar que también contamos con el generoso apoyo de investigadores del Departamento de Matemáticas, pues existen cursos ofrecidos por ellos que nuestros estudiantes pueden acreditar en nuestro programa. Así mismo, compartimos frecuentemente cursos (mediante videoconferencia) con el grupo de computación de CINVESTAV Guadalajara y con el recién creado Laboratorio de Tecnologías de la Información de Ciudad Victoria, Tamaulipas. Es importante agregar también que hemos colaborado (y lo seguiremos haciendo) con colegas de las Secciones de Bioelectrónica, Mecatrónica y Comunicaciones del Departamento de Ingeniería Eléctrica, así como con otros departamento del CINVESTAV y de otras instituciones tanto nacionales (p.ej., UNAM, UAM, IPN, CIMAT, CICESE, BUAP, etc.) como internacionales (p.ej., la Universidad Joseph Fourier, la Universidad Tulane, la Universidad Politécnica de Cataluña, etc.).


Bibliografía

[1] Anónimo, “Propuesta de Creación del Departamento de Computación del CIEA del IPN. Etapa I: Sección de Computación”, presentado por el Departamento de Ingeniería Eléctrica, CIEA del IPN, 1983.

[2] Arturo Díaz Pérez, “La Sección de Computación: Pasado, Presente y Futuro, CINVESTAV-IPN, 6 de febrero de 2000.

[3] Varios autores, “Propuesta para el Establecimiento de los Programas Académicos de Posgrado en la Especialidad de Computación”, CINVESTAV-IPN, junio de 2005.

[4] Varios autores, “Plan para el Establecimiento del Departamento de Computación”, CINVESTAV-IPN, marzo de 2006.

[5] Arturo Escobosa, “El Departamento de Ingeniería Eléctrica”, en María de Ibarrola, Pedro Cabrera, René Asomoza, Eugenio Frixione, Augusto García, Miguel Ángel Pérez Angón y Susana Quintanilla (editores), El CINVESTAV. Trayectoria de sus Departamento, Secciones y Unidades, 1961-2001, pp. 189-197, Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del IPN, México, 2002, ISBN 968-5226-13-X.

[6] Aquiles Cantarell y Mario González (coordinadores), “Historia de la computación en México: una industria en desarrollo”, Colección Hombre Digital, México, 2000, ISBN 968-5215-01-4.

[7] C. Gonzales, “A computer engineering degree in Mexico”, in Papers of the SIGCSE/CSA Technical Symposium on Computer Science Education, pp. 48-52, ACM Press, New York, USA, 1978.



Notas

1 En 1999 el CONACyT indicaba que existían menos de 150 doctores en computación (o áreas afines) en México.

2 Aunque el Instituto Politécnico Nacional comenzó a ofrecer, desde 1965, las carreras de técnico en computación electrónica y técnico en mantenimiento de equipos de computación y electrónica, la primera licenciatura en computación en México (Ingeniería en Sistemas Computacionales) la ofreció el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey en 1968 [7] (en [1] se afirma que inició en 1969 y en [6] se dice que inició en 1967).

3 En 1965, el Centro Nacional de Cálculo (CENAC) del Instituto Politécnico Nacional creó la que parece ser la primera maestría en ciencias con especialidad en computación de México. Para la creación de esta maestría se contó con la colaboración del Dr. Harold V. McIntosh, quien, a la fecha, aún mantiene una estrecha colaboración con el Departamento de Computación del CINVESTAV.